Abierto el pabellón, las pistas de pádel y las de petanca, con restricciones

Con el paso a la nueva normalidad de Arroyo de la Luz, junto al resto del país, la localidad comenzó a recuperar, poco a poco, los servicios que se mantenían cerrados a consecuencia de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus.

Así, en el comunicado emitido en la noche de ayer lunes, 22 de junio, a través de la aplicación web Bandomóvil, informaban que ya se encuentran abiertas las instalaciones deportivas del pabellón de la localidad, las cuales pueden ser utilizadas solo por lo grupos federados, hasta nuevo aviso.

Comunican además que el acceso del público al pabellón será limitado, no pudiendo acceder al mismo los menores de 18 años.

También hay restricciones en las pistas de pádel, que pueden usarse solo pidiendo cita previa, así como en las instalaciones de la petanca, que solo podrán hacer uso de las mismas los socios.

Desde el Consistorio se pide que, quienes hagan uso de las instalaciones extremen las medidas generales de prevención e higiene, respetando la distancia de seguridad de 1,5 metros, mantengan la higiene de manos frecuente con agua y jabón o con geles hidroalcohólicos y usen la mascarilla siempre que no se pueda mantener la distancia interpersonal de seguridad.

Comunican así mismo que el resto de instalaciones se irán abriendo los próximos días, avisando igualmente que todos los servicios que se abran se podrán volver a cerrar si se detectase un uso incorrecto de las instalaciones o servicios que pudieran poner en peligro la salud de los usuarios.

Para utilizar las instalaciones debemos extremar las medidas generales de prevención e higiene exigibles a toda la ciudadanía por lo que se deberá respetar una distancia de seguridad de 1,5 m, higiene frecuente de manos con agua y jabón, o en su defecto, con geles hidroalcohólicos y uso obligatorio de mascarilla cuando no pueda mantenerse la distancia de seguridad.

El resto de instalaciones se irán anunciando en los próximos días. Todos los servicios que se abran podrían volver a cerrarse si de detectase o comprobase un uso no correcto de dichas instalaciones o servicios que pudieran poner en peligro la salud de los usuarios.