El Ayuntamiento arroyano informa sobre el protocolo a seguir para los usuarios de la piscina

El próximo lunes, día 21 de junio, dará comienzo la temporada de baños en Arroyo de la Luz con la apertura de su piscina municipal. La localidad volverá a poder disfrutar de estas instalaciones tras haber estado cerrada desde 2019, ya que el Ayuntamiento decidió el pasado verano, priorizando la salud por encima de todo debido a la situación sanitaria que se vivía en ese momento, no abrirla evitando así cualquier riesgo de contagio.

Para la apertura en este verano de 2021, el Consistorio ha puesto en marcha un protocolo en prevención del Covid siendo la primera norma el uso obligatorio de la mascarilla en todo el recinto e instalaciones de la piscina, excepto en el agua.

El acceso al recinto se llevará a cabo por la puerta principal, donde estará ubicada la taquilla con un puesto de desinfección de manos.

Para garantizar lo máximo posible la seguridad e higiene, a la entrada se facilitará a los usuarios una bolsa de plástico para introducir los residuos que generen, la misma será depositada en el contenedor correspondiente, a la salida de la instalación.

Para garantizar la distancia de seguridad de 1.5m, en la entrada habrá marcas para guardar la distancia, en el caso que sea necesario esperar para entrar en las instalaciones.

La salida se hará por dos puertas exteriores comunicadas directamente con la zona playa, las cuales también estarán señalizadas.

En todo momento se controlará por parte de los trabajadores que no se produzcan aglomeraciones en ninguna zona de las instalaciones, respetando la distancia de seguridad interpersonal de 1.5 m. Para ello, siempre que sea posible, estará señalizado.

Igualmente habrá que respectar la distancia de 1,5 metros entre los usuarios dentro de las instalaciones, donde habrá zonas señalizadas con el número de personas permitidas, evitando pararse ni formar grupos que generen aglomeraciones.

Antes de entrar en el vaso de agua, utilizarán los geles hidro-alcohólicos existentes en la entrada.

Se evitará lo máximo posible estar circulando por la zona de playa o recreo, si no es necesario. Permanecerá en su perímetro de seguridad, manteniendo la distancia de seguridad interpersonal de 1,5m, y con mascarilla.

Recomendable que las relaciones colectivas se den entre grupos de convivencia estable.

Los objetos personales permanecerán dentro del perímetro de seguridad para evitar el contacto con el resto de usuarios. Las sillas privadas de lleven los usuarios, deben permanecer dentro del perímetro de seguridad para evitar contactos con otras personas, y ser desinfectada para garantizar su higiene, siendo esta responsabilidad del usuario de la silla.

En ningún caso las sillas podrán quedarse en la piscina, estas deben ser retiradas por su propietario cuando finalicen su estancia.

Las duchas de los vestuarios estarán clausuradas durante la crisis sanitaria, se utilizan los recursos necesarios y carteles indicativos para evitar el uso de las mismas y que los usuarios estén informados. El uso del aseo queda limitado a 2 personas, salvo en aquellas circunstancias de que una de las personas deba precisar la asistencia de un acompañante. Los vestuarios quedan limitados a 5 personas en el vestuario de mujeres y 3 en el de hombres.

El uso de las mesas presentes está limitado a un máximo de 4 personas por mesa, debiendo limpiarlas los propios usuarios antes y después de su uso.

El establecimiento de hostelería encargado de gestionar el bar que se ubica dentro de la piscina debe seguir los protocolos correspondientes a este servicio, y debe tenerlos a disposición en cualquier momento que se le requieran.